El diezmo, como práctica de dar una décima parte de los ingresos a Dios, tiene raíces profundas en la historia judía y se menciona a menudo en el Antiguo Testamento. Sin embargo, la pregunta que surge para los cristianos es: ¿cómo se aplica el diezmo en el Nuevo Testamento? ¿Es una obligación legal o una guía para la generosidad?
En este artículo, exploraremos el concepto del diezmo desde una perspectiva cristiana contemporánea, examinando las enseñanzas de Jesús y los apóstoles en el Nuevo Testamento. Analizaremos las diferentes perspectivas sobre el diezmo y sus implicaciones para la vida cristiana hoy en día.
El Diezmo en el Antiguo Testamento: Un Contexto Histórico
El diezmo en el Antiguo Testamento estaba ligado a un sistema legal específico. Dios instruyó a su pueblo a dar el diezmo como una forma de expresar su gratitud y reconocimiento por su provisión. El diezmo se utilizaba para apoyar el sacerdocio, los levitas y para proporcionar para los pobres y necesitados.
Ejemplos de esto se encuentran en Deuteronomio 14:22-29 y Levítico 27:30-33. Estos pasajes establecen claramente el diezmo como una obligación legal para el pueblo de Israel.
El Diezmo en el Nuevo Testamento: Un Nuevo Pacto, Nuevos Principios
Jesús, como el Mesías, trajo un nuevo pacto con Dios. Este nuevo pacto se basa en la gracia y la fe, no en las obras de la ley. Aunque Jesús no habla explícitamente del diezmo en el sentido legal del Antiguo Testamento, sí ofrece enseñanzas sobre la generosidad y la gratitud.
En Lucas 6:38, Jesús dice: “Den, y se les dará; se les dará una medida buena, apretada, remecida y que rebosa. Porque con la misma medida con que midan, se les medirá a ustedes”. Esta enseñanza enfatiza la importancia de dar generosamente y recibir a cambio una bendición abundante.
Las Perspectivas sobre el Diezmo en el Nuevo Testamento
Existen diversas perspectivas contemporáneas sobre el diezmo en el Nuevo Testamento:
1. La Obligación Legal
Algunos cristianos creen que el diezmo sigue siendo una obligación legal para los cristianos, basándose en el principio de la continuidad de la ley moral del Antiguo Testamento. Argumentan que, aunque el sistema legal del Antiguo Testamento ha sido reemplazado por la gracia, los principios morales siguen siendo válidos.
2. La Guía para la Generosidad
Otra perspectiva ve el diezmo como una guía para la generosidad y la gratitud, pero no como una obligación legal. Los cristianos que apoyan esta postura argumentan que, en lugar de enfocarse en una cantidad específica, la prioridad es dar generosamente, motivados por el amor a Dios y al prójimo.
3. La Libertad en la Ofrenda
Una tercera perspectiva enfatiza la libertad en la ofrenda. Los cristianos que comparten este punto de vista creen que las ofrendas deben ser dadas de manera voluntaria y con alegría, sin estar limitados por una fórmula preestablecida. La cantidad y la forma de dar deben ser guiadas por el corazón y la convicción personal.
El Diezmo en la Iglesia Contemporánea
La práctica del diezmo en la iglesia contemporánea varía mucho. Algunas iglesias lo consideran un requisito para sus miembros, mientras que otras lo promueven como una guía para la generosidad. La libertad de decisión y la responsabilidad individual juegan un papel importante en la forma en que los cristianos abordan el diezmo.
Si bien no existe un mandato legal en el Nuevo Testamento que obligue a los cristianos a diezmar, la Biblia nos invita a dar generosamente, a compartir nuestras bendiciones con los demás y a apoyar a la iglesia.
Para decidir sobre el diezmo, es importante reflexionar sobre las siguientes preguntas:
¿Cómo puedo expresar mi gratitud a Dios por su provisión?
¿Qué significa ser generoso en mi contexto?
¿Cómo puedo utilizar mis recursos para bendecir a otros y a la iglesia?
Conclusión: Más que un Cálculo
El diezmo no es solo un cálculo matemático, sino un acto de fe, gratitud y amor. Es una oportunidad para expresar nuestra dependencia de Dios y nuestra disposición a compartir nuestras bendiciones con los demás.
En última instancia, la decisión de diezmar debe ser personal y guiada por la convicción individual. La Biblia nos invita a ser generosos y a dar con alegría, reconociendo que Dios es el dueño de todo lo que tenemos y que nuestras ofrendas son una expresión de nuestra fe y nuestro amor por Él.
Preguntas Frecuentes sobre el Diezm
¿Qué es el diezmo en el Nuevo Testamento?
El diezmo en el Nuevo Testamento es un principio de dar el 10% de tus ingresos a la iglesia.
¿Es obligatorio el diezmo en el Nuevo Testamento?
No hay un mandato explícito para diezmar en el Nuevo Testamento. Sin embargo, la Biblia alienta a los cristianos a dar generosamente, y el diezmo es una forma de hacerlo.
¿Cómo se aplica el diezmo en el Nuevo Testamento?
El diezmo en el Nuevo Testamento se aplica a los ingresos, no a las ganancias. Esto significa que debes diezmar sobre tu salario bruto, no tu salario neto.
¿Hay alguna excepción al diezmo en el Nuevo Testamento?
No hay excepciones específicas al diezmo en el Nuevo Testamento. Sin embargo, los cristianos deben diezmar con un corazón dispuesto y no por obligación.
¿Cuáles son los beneficios del diezmo en el Nuevo Testamento?
Los beneficios del diezmo en el Nuevo Testamento incluyen la bendición de Dios, el crecimiento espiritual y la satisfacción de ayudar a otros.
